Más allá de Facetune: preocupaciones sobre la privacidad en las aplicaciones que modifican la apariencia

Aunque aplicaciones como Facetune puedan parecer una diversión inofensiva, ofreciendo la posibilidad de borrar imperfecciones, blanquear dientes o incluso alterar rasgos faciales con unos pocos toques, el precio de tales transformaciones digitales puede ser sorprendentemente alto. Estas aplicaciones a menudo requieren un acceso amplio a tus datos, lo que representa una señal de alerta para cualquiera que se preocupe por cómo se recopila, utiliza y potencialmente se malutiliza su información personal.
Acceso a la cámara
Uno de los aspectos más preocupantes de estas aplicaciones es su necesidad de acceso a la cámara. Aunque esto pueda parecer necesario para funcionar – después de todo, ¿cómo editar una foto que no puedes ver? – les otorga una línea directa a tus fotos y videos más personales. La información obtenida va mucho más allá de la imagen que estás editando en ese momento.
Imagina un escenario en el que estás usando una aplicación para cambiar el color de tu cabello y probar un nuevo look. La aplicación podría no solo capturar la foto que estás editando, sino también acceder y recopilar datos de toda tu galería de fotos. Esto podría incluir desde selfies con amigos y familiares hasta fotos de vacaciones, potencialmente con imágenes sensibles o incluso videos que no querrías que nadie vea. A menudo no hay manera de saber con certeza qué datos están siendo accedidos, especialmente con aplicaciones que tienen políticas de privacidad mal redactadas.
Una caja negra de recopilación de datos: ¿Qué información va a dónde?
Los datos recopilados por estas aplicaciones pueden ser extensos y, a menudo, los términos de servicio ofrecen poca claridad sobre qué es exactamente lo que se toma. Aquí tienes un desglose de algunos de los posibles puntos de datos que se recopilan:
- Datos de reconocimiento facial: Con el auge de la tecnología sofisticada de reconocimiento facial, las aplicaciones que alteran rasgos faciales podrían estar recopilando datos valiosos sobre la estructura única de tu rostro. Estos datos podrían luego usarse para entrenar la inteligencia artificial de la aplicación, lo que potencialmente conduciría a la creación de software de reconocimiento facial aún más avanzado con implicaciones de gran alcance.
- Metadatos: Cada foto que tomas contiene metadatos, que son esencialmente datos sobre los datos mismos. Esto puede incluir información como la fecha y hora en que se tomó la foto, el tipo de cámara utilizada e incluso la ubicación donde se capturó la imagen (dependiendo de la configuración de tu cámara). Aunque esta información pueda parecer inofensiva por sí sola, cuando se combina con otros puntos de datos, puede pintar un cuadro detallado de tu vida y hábitos.
- Grabaciones de voz: Algunas aplicaciones, especialmente aquellas que ofrecen filtros de voz, podrían solicitar acceso a tu micrófono. Esto significa que podrían estar recopilando grabaciones de voz además de tus fotos y videos. Las grabaciones de voz pueden usarse para diversos fines, desde crear perfiles de voz para publicidad dirigida hasta ser utilizadas en software de reconocimiento de voz.
Los riesgos del mal uso de datos: ¿Cómo puede usarse tu información en tu contra?
Los datos recopilados podrían usarse para diversos fines, algunos benignos y otros potencialmente dañinos. Aquí algunas formas en que tu información podría ser mal utilizada:
- Publicidad dirigida: Como se mencionó antes, los datos recopilados por estas aplicaciones podrían usarse para crear perfiles detallados sobre tu apariencia, hábitos e incluso ubicación. Esta información podría luego venderse a empresas publicitarias externas, que la usarían para dirigirte anuncios específicamente personalizados.
- Fuerzas del orden y reconocimiento facial: El auge de la tecnología de reconocimiento facial ha generado preocupaciones sobre su uso por parte de las fuerzas del orden. Los datos recopilados por aplicaciones que alteran la apariencia podrían potencialmente contribuir a bases de datos de reconocimiento facial, lo que genera preocupaciones de privacidad y podría afectar tu capacidad para moverte libre y anónimamente.
- Robo de identidad y explotación: En el peor de los casos, los datos recopilados por estas aplicaciones podrían usarse con fines maliciosos. Los datos de reconocimiento facial, combinados con otra información personal obtenida de metadatos o grabaciones de voz, podrían usarse para robo de identidad o incluso chantaje.
- Pérdida de control sobre tu imagen: Quizás lo más alarmante es la posibilidad de que estas compañías alteren o publiquen tus fotos sin tu consentimiento